Distrito de Lurín
- Departamento: Lima
- Provincia: Lima
- Superficie: 181.12 km²
- Población: 89,195 hab. (censo 2017)
- Ubigeo: 150119
El distrito de Lurín es uno de los 43 que conforman la provincia de Lima, ubicada en el departamento de Lima, en el Perú.
Resumen
Geografía
El distrito de Lurín es un distrito costeño que se encuentra al sur de Lima entre el km 32 y el km 42 de la carretera Panamericana Sur. Posee en sus dominios marítimos dos islotes frente a la playa San Pedro.
Relieve
Este distrito consta de litoral marítimo poseyendo playas muy hermosas destino turístico sobre todo en la época del verano; se encuentra situado desde los 0 msnm hasta los 380 msnm considerado el último valle verde de Lima.
Hidrografía
Este distrito de Lurín pertenece al valle del río Lurín el cual atraviesa el distrito desembocando al Océano Pacífico.
Clima
Posee un clima no muy húmedo con 18 °c en promedio a pesar de ser un distrito litoral.
Limita al norte con los distritos de Pachacámac, Villa María del Triunfo y Villa El Salvador, al este también con el distrito de Pachacámac, al sur con el distrito de Punta Hermosa y al oeste con el Océano Pacífico.
Historia
La historia del distrito de Lurín está relacionada con el pasado del valle Sagrado de Lurín, al tener un desarrollo compartido y al hecho de constituir en el tiempo una unidad geográfica, económica y política.
Los restos más antiguos del ser humano en el valle de Lurín han sido encontrados en los cementerios de la Tablada de Lurín con hasta 7,000 a.C. de la Época Lítica. Pero la formación cultural de una organización estamental data de desde el 200 a.C. y con la construcción de dos templos grandes de contornos ovalados en el hoy Santuario del Dios Pachacámac. Un segundo momento de apogeo en el Santuario se dio en el horizonte medio (700 d.C. a 1200 d.C.) con la presencia masiva de pirámides con rampa y la influencia Wari. Un tercer momento se da con la formación del señorío de Ychsma (1000 -1470 d.C.) que fue la precedente a la ocupación cuzqueña (1470-1532 a.C.). Lo más célebre de toda esta etapa fue la importancia del oráculo del templo, al cual llegaban de todas las naciones en peregrinación, para formular sus consultas y escuchar sus predicciones.
La ciudad sagrada más famosa de toda la costa peruana fue saqueada a la llegada de los españoles en 1533. Durante la conquista española, el valle de Lurín sufre un traumático cambio estructural. Se recomponen los espacios de ocupación territorial y atraviesa una depresión demográfica. Un cronista de la época aseguraba que a la llegada de los españoles (1533) había 25,000 habitantes en el valle y cuarenta años después (1574) había disminuido en unos 2,000. En 1573 el valle es visitado por Rodrigo Cantos de Andrade, quien realiza las famosas reducciones de indios en este lugar, y busca realizar algunas obras de uso público como fue la reconstrucción del antiguo puente.
Durante este periodo de cambios, las tierras agrícolas y los naturales residentes en este lugar son dados en encomienda a los conquistadores, para que los puedan evangelizar. Los encomenderos del siglo XVI fueron Miguel de Estete, Juan de Maldonado, Francisco Gonzáles, Juan de Villafuerte, entre otros. Estas encomiendas se fueron trasformando en el siglo XVII, con el protagonismo de nuevos personajes, formándose las haciendas tradicionales de Lurín: San Pedro, Buena Vista, Villena y Las Palmas.
Este valle tenía un puerto llamado Quilcay, que se había formado alrededor de 1570. Este se encontraba ubicada junto a la playa de San Pedro, y su actividad económica principal era la pesca. Quilcay fue el antecedente del posterior pueblo viejo de San Pedro de Lurín.
El pueblo de Quilcay se encontraba frente a las Islas de Cavillaca, tenía una plaza y una iglesia, desde donde se comenzó a evangelizar a los pescadores del pueblo. En 1598 se forma la Cofradía de San Pedro con la autorización de Santo Toribio de Mogravejo. Y con el tiempo el pueblo adopta a aquel santo como su patrón, denominándose primeramente San Pedro de Quilcay y posteriormente San Pedro de Lurín.
Este pueblo, cuando corría el año 1687, sufre una tragedia, al producirse un maremoto, que destruye el pueblo. Sobreviven 160 pescadores, que deciden trasladarse a otro lugar. El espacio elegido se encontraba en la hacienda Chacra Grande (San Pedro), dentro del mismo valle agrícola, y frente al cerro Centinela que los ayudaría como refugio ante posibles desastres naturales.
En este nuevo lugar el pueblo comienza a denominarse San Pedro de Lurín. A sus pobladores se les da tierras agrícolas para que las trabajen, produciéndose con este hecho una transformación económica y cultural de sus habitantes. Alrededor del año 1700 se comienza a construir la iglesia San Pedro, y es posible que el protagonista de esta obra fuera el cura Toribio de Luxan, quien mando construir la pila bautismal en 1734.
Durante el siglo XVIII, la ubicación del pueblo de Lurín, asentado en el cruce de dos caminos (el camino costero y el camino del valle) hacen que tome importancia y se convierta en la «capital del valle».
Durante la colonia la producción agrícola de las haciendas tradicionales de Lurín eran de pan llevar y frutales. Una hacienda importante, por su extensión, era el de San Pedro, propiedad de la Congregación San Felipe Neri, que abarcaba casi toda la ribera de la playa hasta varios kilómetros adentro. Las otras fueron Buena Vista y Villena propiedad de Francisco Lastres, Mamacona de Pedro Canoli y las Palmas.
Iniciada la vida republicana las haciendas pasan por una etapa de modernización. Un ejemplo de esto fue la hacienda San Pedro, su administración pasa de manos religiosas a laicas.
Inicialmente esta es asumida por los militares, durante la primera mitad del siglo XIX: Agustín Gamarra, Francisca Zubiaga, José Rufino Echenique, J. M. Egusquiza. Durante esta etapa llega el primer trapiche a vapor del país a San Pedro. Durante la segunda mitad del siglo XIX comienza a ser administrada por manos civiles: Pablo Elguera y finalmente Vicente Silva, quien la compra en 1879. Durante esta etapa comienzan a llegar cientos de chinos coolis, como mano de obra, a la hacienda.
Durante este régimen republicano se establece el distrito de Lurín, existiendo inicialmente como la única autoridad local el gobernador de Lurín. Pero es mediante ley del 2 de enero de 1857 que se crea la municipalidad de Lurín, para administrar este espacio distrital que se había venido configurando durante mucho tiempo. El primer alcalde fue Ignacio Pasión Soliz, quien juramento en abril de 1857 en la Casa Consistorial del pueblo.
Una obra importante del siglo XIX fue la construcción del Puente de Lurín, sobre el río del mismo nombre, que fue el primer puente colgante de metal del país. Esta estructura fue mandada adquirir por el presidente Ramón Castilla en Inglaterra el año de 1850, pero debido a que las piezas llegaran a finales de su gobierno, el armado y construcción se terminó de hacer a comienzos del gobierno de José Rufino Echenique, quien fue el que la inauguro en 1851. Este puente tiene su importancia en ser una de las primeras obras de ingeniería en metal hechas en el país, además fue la que propicio la formación del pueblo Puente Lurín (Julio C. Tello).
Un hecho importante en la vida agrícola de Lurín, en este periodo, fue la desmembración de la enorme hacienda San Pedro. En 1901 el dueño de la hacienda, Vicente Silva, divide su predio para dárselo en herencia a sus hijos, formándose las haciendas: Mamacona, Santa Rosa, San Pedro, San Vicente, Huarangal, Cacica y el Olivar.
Durante la década del veinte del siglo pasado, el valle de Lurín atraviesa un periodo de cambio, gracias a la llegada de nuevos medios de comunicación. El ferrocarril Lima Lurín llega al pueblo de Lurín en 1918, y la carretera Chorrillos- Lurín la manda a construir el dueño de la hacienda las Salinas en 1923. Estos hechos marcan un antes y un después en Lurín. Aparecen nuevos hacendados, un ejemplo de ello es Federico Salinas. Las tierras comienzan a tener un nuevo valor, aparecen denuncios agrícolas, mineros, de agua, etc. Se establece una comisión técnica agrícola en el valle de Lurín, y se construyen nuevos canales de irrigación. Las comunicaciones con Lima son más fluidas, y se produce un repunte comercial. En el pueblo de Lurín llega la luz eléctrica en 1925, cinema en 1924, y se construye la plaza principal con glorieta, bancas y jardín en 1925 dándosele el nombre de Plaza Leguía.
En la actualidad el distrito de Lurín está conformada por cinco zonas (Villa Alejandro, Julio C. Tello, Huertos de Lurín, Lurín cercado y Km.40) con una extensión de 200 km2 y una población estimada de 96,331 habitantes.