Museo del Convento de los Descalsos
El museo ubicados en antiguos claustros del Convento de los Descalsos, construido en la época colonial exhibe antiguos lienzos de la escuela Limeña, Cuzqueña y Quiteña; libros corales y ambientes del antiguo convento.
- Dirección: Calle Manco Cápac, 202·A – Alameda de los Descalzos, Rímac
- Teléfono: (01) 4810441 / (01) 4813433
- Email: [email protected]
- Facebook: www.facebook.com/museodelosdescalzospaginaoficial
Resumen
Horario de visita
- Miércoles a lunes: 9:30 am. a 1:00 pm. / 2:00 pm. a 5:30 pm.
Información
Se encuentra ubicado al costado del Convento de los Descalzos, al final de la Alameda de los Descalzos.
El museo del convento de los descalzos abrió sus puertas en 1981, luego de pasar por varias reparaciones y acondicionar varios ambientes para darle una mayor facilidad al guiado turístico.
Además, para este fin, se restauraron importantes lienzos y se les dividió por escuelas, siendo las más representativas la escuela Limeña, Cuzqueña y Quiteña. Claustros, comedores, celdas, capillas, refectorio, bodega y enfermería, además de lienzos y objetos antiguos eran mostrados por primera vez al público el día de la inauguración.
El museo cuenta con una arquitectura sencilla ya que se trata del convento antiguo. Muestra una espectacular colección de pinturas que suman un total de 400 piezas de pintores famosos como Murillo, Jaramillo, Bitti, Angelino Medoro, Miguel de Santiago, Diego Tito Quispe, Javier Cortes, Joaquín Urreta, Julian Jayo entre otros.
En los claustros y corredores se puede apreciar los retratos de los más renombrados varones de ciencia y santidad. La capilla del Carmen, construida en 1733 por Luís de Santa María, es una de las más preciosas de todo el convento. Cuenta con un retablo dorado a fuego, con imágenes policromas, columnas retorcidas y ventanas con láminas delgadas de piedra de Huamanga, cuadros y sillones fraileros añadiéndose a todo esto un palco o coro con salida a la enfermería desde donde los enfermos podían escuchar misa.
En todo el museo podemos encontrar varios claustros destacándose entre ellos el claustro Guardianal del siglo XVII en cuyas paredes hay retratos de los más distinguidos religiosos.
El claustro de enfermería tiene una botica y varias celdas de reposo para el enfermo y su acompañante.
En el claustro procesional o vía crucis que data del siglo XVIII, se realizaban las procesiones intimas del convento y en cuyas paredes están las 14 estaciones del vía crucis.
Existen dos claustros más que no son de acceso al público que son el antiguo noviciado (S. XVII) y el claustro provincial (S. XVIII).
Entre las capillas encontramos La Sacristía donde podemos observar el lienzo de nuestra Señora de los Ángeles y la vida de la virgen. Frente a esta hay una pequeña capilla más pequeña donde se encuentra la imagen de San José con el niño, hecha por Murillo y otra de un pincel Jesuita Bitti, de la Virgen con una roza en la mano.
Entre las otras áreas del museo y los elementos antiguos que hay en él, podemos destacar su bodega de vinos que aún conserva sus barriles así como parte de la cocina con grandes peroles donde se llevaba a cabo la porciúncula.
También en una de las áreas, aún se conservan los libros corales que eran impresos en el mismo lugar y eran empastados con cuero de algunos animales.
Igualmente, los cuartos de guardianía, guardan la decoración propia de las celdas de sus antiguos moradores, constando de una cruz, una cama, una silla y una mesa por toda ornamentación.
Lo que fue la cocina conventual, hoy es una pinacoteca, con una impresionante muestra de lienzos.
La iglesia, reconstruida a mediados del siglo XVIII cuenta con una bóveda de cañón, coro alto y altares neoclásicos del siglo XIX, una torre con un campanario y la casa de ejercicios.